El día 11 de
Febrero nos enteramos sorpresivamente, a través de los diversos medios de
comunicación la renuncia de Joseph Ratzinger (Benedicto XVI).Toda la problemática que sufre la iglesia Católica no es nueva, diversas acusaciones
contra los “sumos pontífices”, Sacerdotes acusados de pedofilia, encubrimiento
de diversos crímenes por parte de la Iglesia…entre otros, la lista es larga
suma y sigue.
Por supuesto no podemos dejar de obviar el
hecho de que Benedicto XvI, en su infancia participó en las filas de la milicia
Nazi, otro agravante que solo contribuye a desprestigiar la “intocabilidad de
la iglesia”. Me llama la atención que en algún momento se habló por parte de
los católicos acérrimos acerca de la renuncia del Papa como: “Una desacralización al Pontífice, cumpliendo con su misión destructora de la
iglesia por el Judaísmo Internacional”, enfatizando en Falsos Papas.
Por otra
parte, luego de la remoción de Benedicto XVI el mundo parece expectante
esperando un “sustituto”. Los días pasan y el 13 de Marzo se lanza el nombre
del sumo Pontífice que sucede al anterior Papa, nada menos que Jorge Mario
Bergoglio (Francisco I), quien al igual que su antecesor tiene un pasado, por
decirlo menos, complicado. El actual Papa colaboró con la dictadura militar
entre los años 1976 y 1983, teniendo reiteradas visitas con el Dictador de
aquel entonces; Jorge María Videla. Al sumo pontífice se le adjudican los
crímenes de sustracción, retención y ocultamiento de niños menores de 10 años
con el fin de aniquilación, además se le acusa de delatar a sus colegas con el
régimen de la época donde posteriormente, los dos sacerdotes fueron torturados.
Como si lo anterior no fuese poco, Bergoglio rechaza la Homosexualidad y el Aborto, considerándolo “el demonio contra el plan de dios” siendo muy duro en
sus críticas hacía el sistema político actual de Argentina.
A causa de todos estos motivos es que se ve la desilusión de la gente por parte del Clero, hay un sentimiento compartido de “estafa” por parte de la sociedad religiosa, otros tantos como yo, compartimos el sentimiento de rechazo y superficialidad que merece el tema en general.
A raíz de lo anterior me surgen varías preguntas. Solo por mencionar algunas…
¿Cuál es la línea que plantea la iglesia Católica actualmente? Como espectadores me parecen nefastos los crímenes y secretos que se destapan a diario, poniendo en tela de juicio la honorabilidad y la intocabilidad de algo que está manchado hace bastante tiempo, pareciera que aquellos de arriba quisieran reestructurar a través de la fórmula del error perfilando santos.
Incluso y a pesar de ser potenciales hechos basados en conspiraciones se habla de la Iglesia Católica como “La Gran Ramera”…y que aquel reinado está acabando, que no se debe creer en una falsa Iglesia, etc, etc. (Apocalipsis 17 y 18 por si alguien está interesado en leer lo que dice en la biblia sobre aquello).
¿Cuánto tiempo tiene la religión para redimirse?, ¿cuánto tiempo más la sociedad se enfrentara a la creencia de la fe ciega y a cuestionar, pedir respuestas y exigir claridad? Respuestas no resueltas quizás y entonces; y aquí me enfrasco en la duda bestial…
¿Son necesarias estas figuras en la actual sociedad, son relevantes? A mi parecer la Iglesia y sus pseudo “santos” no tienen importancia, no generan relevancia y por el contrario solo justifican su fe en dejaciones y abusos a la sociedad, entonces considero que depositar confianza y fe solo le da más fuerza a la idea de que la religión no nos quiere dejar pensar, nos prefiere silenciosos rezando a falsas figuras, arrastrándonos entregándoles más poder, dejándonos ser gobernados e ordenados moralmente. Por ello solo nos resta mirar el espectáculo y ser siempre incrédulos, juiciosos esperando mientras la iglesia se desmorona… ¿Qué show tienen preparado para mañana el Papa y el Clero?
A causa de todos estos motivos es que se ve la desilusión de la gente por parte del Clero, hay un sentimiento compartido de “estafa” por parte de la sociedad religiosa, otros tantos como yo, compartimos el sentimiento de rechazo y superficialidad que merece el tema en general.
A raíz de lo anterior me surgen varías preguntas. Solo por mencionar algunas…
¿Cuál es la línea que plantea la iglesia Católica actualmente? Como espectadores me parecen nefastos los crímenes y secretos que se destapan a diario, poniendo en tela de juicio la honorabilidad y la intocabilidad de algo que está manchado hace bastante tiempo, pareciera que aquellos de arriba quisieran reestructurar a través de la fórmula del error perfilando santos.
Incluso y a pesar de ser potenciales hechos basados en conspiraciones se habla de la Iglesia Católica como “La Gran Ramera”…y que aquel reinado está acabando, que no se debe creer en una falsa Iglesia, etc, etc. (Apocalipsis 17 y 18 por si alguien está interesado en leer lo que dice en la biblia sobre aquello).
¿Cuánto tiempo tiene la religión para redimirse?, ¿cuánto tiempo más la sociedad se enfrentara a la creencia de la fe ciega y a cuestionar, pedir respuestas y exigir claridad? Respuestas no resueltas quizás y entonces; y aquí me enfrasco en la duda bestial…
¿Son necesarias estas figuras en la actual sociedad, son relevantes? A mi parecer la Iglesia y sus pseudo “santos” no tienen importancia, no generan relevancia y por el contrario solo justifican su fe en dejaciones y abusos a la sociedad, entonces considero que depositar confianza y fe solo le da más fuerza a la idea de que la religión no nos quiere dejar pensar, nos prefiere silenciosos rezando a falsas figuras, arrastrándonos entregándoles más poder, dejándonos ser gobernados e ordenados moralmente. Por ello solo nos resta mirar el espectáculo y ser siempre incrédulos, juiciosos esperando mientras la iglesia se desmorona… ¿Qué show tienen preparado para mañana el Papa y el Clero?
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