El feminismo. ~ Microcosmos

jueves, 8 de diciembre de 2011

El feminismo.


¿Nos consideramos parte de este movimiento e ideología?
Cuanto conocemos esta posición intelectual y política, proclamando feminismo a los cuatro vientos, como regalar nuestra castidad a los curas.
“Lo que todavía nos falta a las mujeres aprender es que nadie te da poder. Simplemente lo tienes que tomar tú.” (Roseanne Barr)
El feminismo siempre ha existido, y puede afirmarse en diferentes sentidos. En su sentido más amplio, las mujeres de manera individual o colectiva, se quejan del injusto y amargo destino bajo las distintas esferas de todos los tiempos, reivindicando una situación diferente, vivir de mejor manera, con nuevas herramientas e igualdad bajo los parámetros del machismo, que nos conduzcan a estados mas llevaderos y comprometidos en los cuales argüir con hechos de lo que realmente somos capaces. Intentando derrocar el término “genero débil”; termino crítico y desigual para definir a el género femenino, usado en la esfera del presente y a su vez en los tiempos antiguos, denigrando y subvalorando la esencia y poder que posee cada mujer en su naturaleza como tal. En consecuencia, nace el movimiento feminista como resultado de la conciencia de las mujeres respecto de su estatus subordinado en la sociedad. A pesar de su variabilidad el feminismo nos ha mostrado como característica perdurable la tensión entre su vertiente igualitarista.

El origen del término feminismo

Muchos atribuyen su invención equívocamente a Charles Fourier (socialista francés de la primera parte del siglo XIX .), que mantenía una posición avanzada con respecto a la condición social de las mujeres, pero quien nunca utilizó el término como tal.
En 1870, Alejandro Dumas hijo, empleó la palabra feminismo para referirse a las reivindicaciones de las mujeres, con las que el por cierto, el escritor no estaba de acuerdo.
Sin embargo la utilización masiva se produjo a principios de los años noventa, como sinónimo de "emancipación de la mujer". La palabra tuvo mucha aceptación tras el primer Congreso público Feminista en París, de 1892”. En la siguiente década ya el término siendo comprendido como una posición firme e intelectual y política, relativa al mejoramiento de la condición femenina se generalizo en los centro urbanos europeos y luego cruzó el Atlántico. A comienzos del siglo XX ya la palabra feminismo se instauró como moneda común en las ciudades Hispanoamericanas, al menos en los círculos ilustrados que tenían como principales fuentes la cultura francesa.
La mujer a través de la historia siempre ha tenido un papel secundario a través de las actividades que se realizan ya desde el Paleolítico instaurando a el hombre como jefe de hogar, sometiendo a la mujer.
  • En Grecia, se le consideraba inferior al hombre, como manifestación de la fuerza opuesta al bien y al orden.
"La mujer es valiosa únicamente en cuanto sepa atender bien el buen gobierno de la casa, custodiando el patrimonio y estando sujeta al marido". Platón.
"Un sólo hombre vale lo que diez mil mujeres": Eurípides.
  • En Roma, se tiene particular consideración (Muchas gracias, no se molesten) a la mujer como esposa y madre, participando en la dirección y educación de los hijos, pero mantienen su condición de inferioridad. En el plano jurídico el puesto de la mujer es en casa. Tiene la ciudadanía, pero no el derecho público, en el plano intelectual se le atribuye toda la fuerza al hombre. Su educación no es paralela con su emancipación y autonomía.
  • En el Antiguo Testamento se le respeta y honra por su progenie o por su trabajo con el que ayuda al marido. Se admite la poligamia. La mujer vale menos que el hombre.
"Viene al mundo una mujer y no viene nada": Flavio Josefo.
  • En el Cristianismo, se mantenía que ninguna persona puede ser considerada como objeto, ni propiedad de un amo. "No es más el hombre que la mujer, porque todos son uno en Cristo" (Gal.-28).
    María: síntesis de todas las virtudes del cristianismo.
    • En la Edad Media Santo Tomás regresa a Aristóteles, biológica y espiritualmente "pasividad de la mujer"; al hombre le pertenece el germen creador, generador. En el hombre predomina la inteligencia. El matrimonio es indisoluble, la mujer adquiere una ventaja, antes el hombre podía repudiar a su mujer y ella no. En clases aristocráticas, la vida de la mujer era monótona y ociosa.
    • En el Renacimiento El humanismo es exclusivo del hombre. Encontramos excepciones de mujeres que estudian, que más bien se aceptaba como un resultado aristocrático. En la aristocracia, la mujer tiene cierta emancipación, no tanto en consideraciones políticas, sino en las expresiones estéticas y culturales. Se cuida mucho la formación religiosa de la mujer piadosa y dedicada al gobierno de la casa.
    • Edad Moderna: Sin actividad, relegada al salón, perezosa, objeto de placer y pasatiempo. Sin cultura, únicamente estética, se ocupa de su cuerpo. La mujer del campo sigue ayudando a su marido y es menos discriminada. Surge la vida urbana: el hombre tiene que salir de su casa y la mujer no tiene posibilidad de compartir actividades con su marido. Ella le sirve para mostrar su triunfo.
    La denostación e inferioridad que se forja desde siglos atrás con respecto a la mujer y sus capacidades, nos habla de un pensamiento completamente poco objetivo. Exacerbando la supuesta inferioridad proclamada por los hombres de todos los tiempos, la ofensa y poco valor de reconocer a la mujer como algo más que un objeto, cerrándole literalmente las puertas a argüir lo que valemos como género transformándose en esclavas de los pensamientos de aquellos que hacían de las mujeres una vida bastante indigna. A modo de crítica no podemos ignorar que muchas mujeres alababan y lo siguen haciendo en el presente, pero a través del tiempo el escenario ha cambiado en forma positiva para nuestro género, y se ha instaurado en nuestra actual sociedad. Por cierto muchas han tomado roles de vital importancia para promover la dignidad y emancipación de la mujer en todos los ámbitos ya sea social, político y cultural, transformando en forma colectiva los deseos de poseer dignidad, derechos, independencia económica y derrocar el machismo.

    Aún hoy cuando se han alcanzado bastantes logros en la lucha por la igualdad de la mujer, debemos reconocer que continúan existiendo mecanismos en los cuales las discriminan. En muchos países, la mujer de hoy vota, participa en la vida pública y política y en teoría, tiene las mismas oportunidades y derechos que los hombres en todos los campos. Sin embargo, en todos los países no se respetan de igual manera estos principios.

    Como antecedente tenemos a la autora teatral y activista revolucionaria Olimpia de Gouges, fue protagonista de la contestación femenina. En 1791 publicó la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana (1791) aprobada por la Asamblea Nacional en agosto de 1789.
    Mary Wollstonecraft (1759-1797) inicia con su obra Vindicación de los Derechos de la Mujer (1792) la larga tradición del feminismo anglosajón. Contraria al absolutismo de los reyes, señaló la conexión existente entre ese sistema político y las relaciones de poder entre los sexos. Los hombres ejercían una verdadera tiranía absolutista sobre las mujeres en el ámbito de la familia y la casa.
    En 1949 Simone de Beauvoir publicó Le deuxième sexe -el segundo sexo-, obra inaugural del feminismo de la segunda mitad del siglo XX.

    A modo de conclusión, las mujeres tanto como los hombres merecemos ser tratados de manera digna y respetable, no es posible que el género femenino esté tras una sombra de aquellos que piensan que las mujeres no somos capaces de formar nuevos horizontes, opiniones etc. Manteniendo equidad entre ambos géneros. Es hora de que muchas mujeres alcen sus voces y dejen de temer a lo que dirá el resto, a no salir de los parámetros del machismo actual. No es justo para nadie tener un eslabón de cabos sueltos y no luchar por unirlos, dándole otro sentido a la esfera de sus presentes. Seamos luchadoras e independientes y demostrémonos a nosotras mismas que somos capaces de hacer tantas cosas si creemos en lo que somos.-

    2 comentarios:

    Me gusta que hayan espacios como estos, a pesar de no estar de acuerdo con el feminismo, al menos no como se plantea en el blog, ya sea por sus ideas expuestas (al menos lo leído de la última entrada) como los argumentos para defenderlas. Espero sigas mejorando, que el espíritu de "reivindicación" ya es a lo menos valorable.

    Sergio Gatica Navarro.

    Su blog es una porquería de principio a fin. Con gusto les explicaría porqué pero quizá pierda mucho tiempo de mi vidae con unas fuckin bitches de tomo y lomo, como deben de ser ustedes, putas de mierda...

    Igual tienen "decente" redacción para ser mujeres (eternos seres inferiores).

    Les dejo un link a mi página: www.Spartans.cl
    (página real con dominio y no glog como ocupan los miserables)

    Me imagino que en vías de mantener incolume la orentación del blog no borrarán mi mensaje.

    Saludos.. Las quiero!

    Publicar un comentario

    Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More